martes, 5 de agosto de 2008

Bodas, y otras mentiras.

Este sujeto de videojuego en nivel 70 tiene más sentido vestido así que cualquier párroco que simplemente amenace con el juicio final vestido de esa guisa ya que hay que saber distinguir la 'realidad', y la pura 'ficción'.




Hace una semana estuve de boda...

No se ya el tiempo que hacía que no entraba en una iglesia, y menos aún la ultima vez que me comí toda la monserga eclesiástica a manos de un hombrecillo con sotana verde de unos 35 años, soltero y con cara de freak.

Bueno, quitando un calor infernal que me hizo romper el mito de que en las iglesias se estaba fresquito, y que me calara literalmente la espalda de sudor, no podía evitar morderme el labio y agachar la cabeza ante la cantidad de mentiras y cuentos chinos que soltaba ese hombre, por no reírme a carcajadas.

Este bicho ( del WoW) es una mezcla entre el cura que nos tocó y el becerro de oro.


- 'Antes de entrar aquí, Dios ya sabía que vendríais' <-- Claro... Dios... ¿no? ¿y los casi siete meses que hacía que se 'alquiló' la iglesia para tal evento?

- 'Antes estabais separados y cada uno tenía su círculo de amigos, ahora sois uno, un mismo núcleo y debéis crearos amigos alrededor...' <-- Justo lo que no se recomienda para que una relación dure, cerrarse sólo a ella. De aquí a cuatro años veremos...

- 'El camino de la familia es el camino que le gusta a Dios.' <-- "y no hablo de familias creadas por maricones, no hay que confundir hijos míos" le faltó añadir ¬¬'

Luego el novio y la novia en el altar dicen cuatro paridas, se esperan ahí sentadicos en primera fila hasta que recitan los votos, se mienten prometen amor eterno, se ponen el anillo que venía en la caja de Kellog's y ya están casados.

- '[y en la enfermedad], por los siglos de los siglos. Amén.' <-- ...Y con la primera mentira empiezan todos los matrimonios. .


Cierto que nadie me ponía ninguna pistola en la cabeza para entrar, pero era algo que hice por mi abuela, total pa' dos bailes que le quedan a la pobre mujer no costaba nada. (Menos mal que estaba en el altar de espaldas y no me veía reírme del cura con mi hermano)

Anécdota: Una señora se nos acercó al banco cabreada mientras esperábamos a que dieran todas las 'ostias' (ya sabéis, un momento en que se forma una cola larguísima para comerse la galleta, ya que en dos horas entra un poco de hambre) y nos dijo "No se que hacéis aquí si no sois beatos". Yo me quedé un poco '...emmmm'

Luego le pregunté a mi madre, y resultó que lo que la mujer fea quería decir en realidad era:

"No se que hacéis aquí si sois unos ateos de mierda!
"

No te jode, el día que en la declaración de la renta se elimine el recuadro por el cual se financia una religión que no es la mía con mis impuestos, ese día si quieren que grapen un cartel de aviso en la puerta:

'Prohibido el paso a Rojos Judeo Masones y Maricas'.

Y otros dentro:

'Prohibido reir', 'Prohibido pensar', ' Prohibido salir sin "donar" o hacerlo antes del sermón'... 'Prohibido votar a cetapé' XD que se yo.



Luego salen, les tiran arroz a la puerta y lo usan para la paella de después, donde todos los hombres irán con el puro de regalo en la mano, en la otra el enésimo cubata y con la corbata en la cabeza bailando Paquito el chocolatero.



- Conclusión -

El cabreo que provocamos en las personas cuando nos reímos de sus creencias es directamente proporcional al tamaño del disparate que sean las mismas.

Es decir, que si nos reímos de que uno crea que la capital de Francia es París, ese uno no se mosqueará nada porque esa creencia no es ningún disparate.

Pero si nos reímos de que uno crea en los marcianos ya empiezan las malas caras.


Finalmente, si nos reímos de alguna de esas colecciones de cuentos fantásticos que son las religiones, las repercusiones pueden implicar ir a la cárcel, ser víctimas de un atentado o, a poco que nos lo propongamos, iniciar una guerra.



Esto último parece un chiste, pero no lo es, si fuera un chiste hubiera dicho: "Mamá, mamá, ¿los pedos pesan? No, hijo, no pesan. Vaya, pues entonces me he cagado".




Enigma: ¿Por qué nos alegramos en las bodas y luego lloramos en los funerales? Porque no somos la persona involucrada. (Para saber la solución seleciona el texto hasta aquí).


Aki un claro ejemplo del verdadero espíritu de la religión:



Con 'siervos de dios' así, como quereís que sienta el más mínimo respeto a algo que va totalmente en cntra de mis principios?

Fin

3 comentarios:

Zalanthza dijo...

Pobre, ateo y rojo, ¿puede haber algo peor? Te falta ser gay… tendrías la triple corona, de cabecita al infierno. En fin, vamos a ser muchos.
De todas maneras el cura de “Tu” Boda se corto un poco, el de la ultima a la que fui yo puso de vuelta y media a las parejas de hecho , a los “depravados y maricones”(textual), a los moros, a las madres solteras… pidió el voto para sus “amigos” y le falto repartir silicios a la salida de la iglesia. Eso si nos recordó que la x debe ir en la casilla de la iglesia o arderemos en el infierno, y que cuanto mayor fuera nuestra contribución(al pasar el cepillo) mayor era nuestro amor por Dios ( iba a “donar” el chicle… pero mi madre dijo que no era de buena educación) Todo esto en una boda en la que la pareja llevaba 5 años viviendo juntos, el padrino es Gay y la madrina milita en el partido republicano, y la hermana de la novia tiene 2 hijos y no tiene pareja…¬¬
Total que todo fue muy emotivo.

PD: Si, cite al innombrable. Al fin y al cabo la frase sacada de SU contexto es una buena frase. De todas maneras juro arrancarme los dedos con pinzas de depilar antes de volver a citarlo.

Franky Molotov dijo...

jajajajajajajajajaja q crack XD

la niña destronada dijo...

mierda, quiero ver esa pelicula!


em... titulo?

Cada vez que entras en mi blog, una niña recibe un balonazo...

ni&ntilde;a ostion Que penica madre!!
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